He died on 11 year old boy had suffered a karting accident
Se había accidentado el domingo mientras corría en una pista de Baradero. Había comenzado a correr en karting a los 8 años. Estaba federado y participaba en dos torneos.
Ramiro Tot, el nene de 11 años que el fin de semana sufrió un grave accidente cuando participaba en una competencia de Karting en Baradero, falleció esta madrugada en el centro de salud donde se encontraba internado.
El chiquito peleaba por su vida desde el domingo, donde permanecía internado en la sala de terapia intensiva del Hospital Austral de Pilar. El jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos de ese centro de salud, Tomás Iolster, explicó que Ramiro “sufrió un traumatismo de cráneo severo" en la tarde del domingo.
Esa noche, a las 21, fue derivado al Austral. “Ingresó con signos de deterioro neurológico irreversible”, detalló Iolster. Esta madrugada, agregó el pediatra, Ramiro “se desestabilizó y falleció”.
Se podría decir que Ramiro era un piloto experimentado: corría en karting desde que tenía ocho años y estaba federado (en la Federación Metropolitana de Automovilismo Derportivo, que pertenece al Automóvil Club Argentino).
En 2009 corría para la categoría PAK-50, pero este año había ascendido a la Pre Junior Prokart y participaba en dos torneos. El domingo, durante la anteúltima fecha del Campeonato Metropolitano que se desarrollaba en el kartódromo de Baradero, Ramiro sufrió un grave accidente.
En una curva de la pista, un karting que venía delante se le cruzó y no pudo esquivarlo. Chocó con el otro auto y el karting se dio vuelta.
Ramiro, se supone, se aferró al volante. "No pudo desprenderse y el auto se le vino encima ”, contó a Clarín Marcelo Casella, testigo del choque y director del sitio web especializado E-Kart.
A pesar del fuerte impacto, el nene conservó todos los elementos de seguridad, incluso el casco. En esa categoría no se usa cinturón de seguridad. Casella explica que es una medida de protección más para evitar lo que le pasó a Ramiro: salir del karting y no terminar aplastado.
