Cauca Indigenous arm themselves against the FARC
El departamento de Colombia está acorralado por la guerrilla y sus pobladores, cansados de tanta violencia, se organizan militarmente. El Gobierno intenta contenerlos
Feliciano Valencia, líder indígena de Cauca declaró que su comunidad ocupará de manera pacífica los puestos de defensa. "Haremos presencia en las bases, rellenando los huecos que han creado para sus trincheras, levantando la infraestructura militar que está poniendo en riesgo a la población civil", afirmó.
El líder indígena afirmó que no van a entrar en "enfrentamientos" con la Fuerza Pública y que todo se hará por la vía del diálogo.
Esta iniciativa de "justicia por mano propia" no cuenta con el aval del gobierno de Juan Manuel Santos, que decidió enviar 2 mil hombres para reforzar el operativo militar en la zona.
"Esta operación se va a profundizar y va a cumplir con sus objetivos en esa zona del país, y nos motiva a seguir de manera comprometida, avanzando en la operación militar, siguiendo la línea que el Presidente de la República ha señalado de hacer una acción integral de hacer presencia", aseguró el ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón.
La violencia en la zona ya obligó a más de 3 mil indígenas a huir de la región en busca de paz.
Desde el jueves 5 de julio pasado, las FARC han atacado varias poblaciones del departamento de Cauca, dejando al menos diez heridos. El viernes 6, cuatro niños y un adulto resultaron heridos en otro ataque de las FARC a la población de Miranda, también en el Cauca.
Los ataques dejaron este domingo 8 cuatro policías muertos, cinco civiles heridos y más de un centenar de viviendas destruidas en el poblado de Toribío, según declaró a la agencia EFE el alcalde Esequiel Vitonás. Allí, se registraron 300 desplazados.
Según detalló el diario colombiano El Tiempo, los hostigamientos revivieron el terror que padeció el municipio el 9 de abril del 2011, cuando estalló una chiva cargada con 14 cilindros bomba que cobró la vida de tres personas y dejó heridas a cien más.